EDUCACIÓN IGUAL A CALIDAD.

Etapa muy motivadora y bonita tanto para los padres como para los niños.

El niño comienza un cambio nuevo y un poco difícil al principio, pero como toda rutina nueva introducida en nuestra vida siempre requiere de un proceso de adaptación que poco a poco el niño consigue, unos tardan más y otros menos pero todos acaban adaptándose, disfrutando y aprendiendo uno de otros en la etapa del colegio.

Para que todo esto al niño se le haga más fácil y llevadero debemos de activar y motivar a la familia para que participe en las actividades del colegio.

Educar es una labor complicada y compleja, ya que es un trabajo de todos, familias y profesores unido al entorno dentro de casa y fuera como es en el colegio.

Una vez dicho esto quería daros mi opinión sobre la participación familiar en la escuela.

Creo que muchas familias no muestran interés por las actividades diarias que realizan sus hijos ya que a lo mejor muchos colegios no les dan suficiente confianza y participación a los padres para que puedan participar en las actividades diarias realizadas en el aula de sus hijos.

Incluso muchas familias suelen hacer comentarios despectivos hacia los profesores "manda mucho", "no enseña bien". Por eso yo propongo que todos los colegios sean más cercanos con los padres, puesto que los problemas que puedan surgirle al niño lo puedan tratar entre ambos.

La participación de los padres en la vida escolar repercute de la siguiente manera:

• Crea una mayor autoestima en el niño.
• Mejora su rendimiento escolar.
• Las relaciones entre padre, profesores e hijos mejoran.
• Actitudes positivas de los padres hacia el colegio.

Cuando vemos a padres interesados por acudir a la escuela en la cual su hijo se encuentra escolarizado quiere significar que les preocupa verdaderamente la educación.

Yo si fuera tu propondría llevar a los padres diferentes días de la semana al colegio a que explicaran su profesión, pero claro esto suena difícil y sobretodo alborotador. Ningún profesor quiere o le gusta que sus niños estén alborotados en clase, pues déjame decirle que de esta forma aprenderían de una manera más emotiva y crearíamos en el niño que se sintiera protagonista diciendo "mirar ese es mi papa/mamá" "mirar cómo trabaja, o lo que nos cuenta mi papa/mamá", porque no hay cosa más gratificante que ver a un niño feliz y encima aprendiendo y experimentando acciones nuevas en su entorno. Sería una experiencia que nunca olvidaría.

A la hora de realizar excursiones también podemos invitar a todos los padres que puedan o quieran a que vengan a pasar el día con los profesores y con los niños, en conclusión incluirlo en todas las actividades y contar con sus opiniones respecto a la situación que se proponga.

¿Y USTED QUE PIENSA?